mendoza | del territorio al ambiente

El Laboratorio de Artes Escénicas del territorio al ambiente surge como un espacio de reflexión en el marco de la/s relación/es cuerpo, espacio y movimiento en las artes escénicas. Durante el mismo se irá construyendo un entramado común, una plataforma desde donde tomar distintas herramientas compositivas que nos permitan estimular y construir diversas interacciones de danza que puedan darse más allá y/o por fuera de los vínculos habituales del dispositivo teatral.

Coordinación Elina Rodriguez
Días de trabajo: 5, 6 y 7 de setiembre de 2014
Carga Horaria: viernes 5 de set - 14 a 18 hs
sábado 6 de set - 10:30 a 14:30 hs
domingo 7 de set - 10 a 14 hs

El Laboratorio de Artes Escénicas (LAE) se enmarca en un proyecto de investigación co- financiado por el Instituto Nacional del Teatro, el Fondo Nacional de las Artes y la Facultad de Artes y Diseño- UNCuyo. Surge como un espacio de reflexión en el marco de la/s relación/es cuerpo, espacio y movimiento en las artes escénicas y sus posibles o infinitos desplazamientos. En esta instancia se ha convocado a Elina Rodríguez[1] como coordinadora de la primera etapa del laboratorio denominada “del territorio al ambiente”.

La propuesta es socializar una investigación que venimos realizando un grupo de personas. Nos preguntamos sobre las posibilidades de hacer danza en la actualidad y en distintos contextos del país. Una reflexión sobre qué cuerpo es el que se mueve, qué procesos es capaz de desencadenar y el interrogante práctico-ético de cómo esas danzas pueden hacerse visibles y circular para intercambiarlas con otros y provocar diálogo. Esta plataforma se alimenta de una dinámica práctica-teórica, integrada por imágenes, videos, textos, sonidos, gestos, danzas, silencios, diálogos, miradas entre otros.
El objetivo es la constante apertura de esta investigación que pongan en relevancia lo colectivo y la reflexión del territorio de la danza para poder así complejizar y enriquecer la búsqueda.

En esta oportunidad se realiza una articulación con integrantes del grupo Otro OJO y el grupo MIDT (mendoza investigación danza teatro) quien diseña una estructura para las jornadas y propone un asunto: “la noción de desierto”. Para ello se toma como categoría operativa, en el laboratorio, la noción de desierto, como lugar de vacío o de potencia, en términos de creación, como disparador: con/en/ser el desierto, etc. pero, además, como lugar que nos identifica dentro de la región de Cuyo. Así esta noción se deja impregnar de sensaciones y preceptos donde el menor detalle se torna importante. El concepto propuesto ya no es ni portador del sentido único de un texto, ni mimético de lo real, sino que surge como una estructura “difusa” en la que se viaja de una sensación a otra, de un territorio a otro modificando la percepción que se tiene de él.

Entonces durante las jornadas se irá construyendo un entramado común, una plataforma desde donde tomar distintas herramientas compositivas que nos permitan estimular y construir diversas interacciones de danza que puedan darse más allá y/o por fuera de los vínculos habituales del dispositivo teatral.

Desde un cuerpo territorio hacia un cuerpo ambiente:
- un cuerpo que integre la capacidad de fundirse, contaminarse, transformarse con/en los otros cuerpos (animados o inanimados). Un cuerpo difuso en el ambiente.
- La observación como estado permanente. Y la aceptación de lo que ya está ocurriendo como acción.
- El espacio como lugar de inter (cambio) donde reposicionarnos constantemente y donde el adentro y el afuera no son posibles de reducir en una lógica. Un ambiente se define por sus movimientos, por su hibridación.
- El tiempo como continuidad y la pregunta de qué pliegues pueden darse en esa continuidad.
- El lenguaje de movimiento es entendido como una consecuencia de las relaciones anteriores.

registro_ Florencia Laparra